Es un equipo de consejeros en Real Estate.
NO. Los consejeros de ETXEA no manejamos cartera de propiedades, sino que acompañamos a la parte compradora en la elección y negociación de la propiedad de su conveniencia, de entre todas las disponibles en el mercado. No participamos en ambas puntas del negocio porque entendemos que esto se contrapone a defender de la mejor manera a una de ellas.
Ahorro de tiempo: el consejero investigará por usted, en portales e inmobiliarias, todas las propiedades que cumplen los requisitos básicos, y hará un primer filtro. Posteriormente visitará cada una de las preseleccionadas, decantando a su vez las mejores, o con mayor potencial de acuerdo al presupuesto y los intereses de su cliente.
Lo acompañará a visitar las propiedades preseleccionadas, para ayudarlo a ver detalles, potencial, defectos y virtudes de cada una.
Podrá incluso ampliar el espectro de selección, visitando algunas propiedades que parezcan adecuadas pero que no se encuentren en el momento en el mercado, incluso de remates. A veces se hacen buenos negocios en forma sorpresiva.
Lo ayudará a negociar la propiedad elegida, buscando llegar al mejor precio posible. Cada vez más propiedades son publicadas por los propios dueños, y esta negociación no siempre es sencilla. El consejero de ETXEA defenderá el negocio como si fuera para sí mismo.
Lo asesorará y lo acompañará durante todo el papeleo posterior.
Eventualmente, también podrá asesorarlo en la posterior refacción o remodelamiento de la misma.
Un fee fijo de USD 1500 por la etapa de búsqueda, si la compra se concreta en menos de tres meses desde el inicio de la misma. En casos puntuales en que la búsqueda se extienda porque los requerimientos son muy específicos o porque ninguna de las propiedades disponibles son del agrado del comprador, el fee se incrementa de mutuo acuerdo, dependiendo del tipo de propiedad y el trabajo que conlleve para el consejero la búsqueda.
Más un “fee de éxito” del 10% de la diferencia entre el valor original de la propiedad y el finalmente negociado. Ejemplo: Se adquiere una casa publicada originalmente en USD 350.000 en un valor de USD 330.000. El fee de éxito será 20.000*10%=USD 2000. Esto es para que los intereses estén absolutamente alineados y el fee de éxito sea mejor cuanto mejor sea la negociación.
Una mejor propiedad, elegida con la ayuda de unos ojos que están acostumbrados a mirar detalles, y que conocen bien los precios y las tendencias del mercado. Una inversión que incrementará su valor. Y seguramente una propiedad mejor negociada. El costo del asesor se paga solo.
El asesor hará una o dos reuniones preliminares para entender bien las necesidades y deseos del cliente, preferentemente acompañado por el núcleo familiar involucrado.
Preguntará exhaustivamente las motivaciones a la mudanza, los requisitos de la nueva propiedad, los “imprescindibles” y los “deseables”.
Averiguará presupuestos, deseable y máximo. Si acepta una propiedad a refaccionar, o deberá estar “para entrar”, y en ese caso presupuesto y plazo que se podría destinar a una refacción.
Luego de que el asesor considere que ha comprendido de manera cabal las necesidades del cliente, se tomará de 2 a 3 semanas para el primer “tamizado” del mercado, en que el asesor consultará y visitará un espectro amplio de propiedades para seleccionar las más adecuadas. Al finalizar este plazo, presentará al cliente las 3 o 4 mejores opciones, que considera que deben visitar juntos.
Lo acompañará en estas visitas, en las que juntos verán y preguntarán todos los detalles de las mismas: metros cuadrados, situación de regularización, orientación frente a la luz solar, reglamentaciones del vecindario (construcciones en altura de ser relevantes por ejemplo), temas de seguridad, posibilidades de ampliación, tipo de estructura, etc, etc, etc.
Luego de estas visitas, se reunirá nuevamente con el cliente y discutirán en forma conjunta cuál es la más conveniente, hasta resolver la adquisición.
El concepto más importante a entender, es que en todo momento el asesor se comporta como si la adquisición fuera para sí mismo, ése es nuestro valor agregado, y nuestro diferencial. Es decir, si realmente no ha aparecido ninguna propiedad en el mercado que cumpla las expectativas del cliente, o que le sea realmente conveniente, no intentará cerrar la operación.
Soy Ingeniera Civil de formación, o sea que tengo todo el ojo hecho a entender de forma rápida la calidad y los eventuales defectos en una construcción. Me he desempeñado durante muchos años en puestos comerciales y gerenciales, lo que me ha dado una gran capacidad de negociación, entendiendo las motivaciones de todas las partes. He participado de varios emprendimientos relacionados al rubro de Real Estate por lo que conozco exhaustivamente el mercado, y además he complementeado mi formación con la de “counsellor”, que me ha ayudado a desarrollar las habilidades de escucha activa y relacionamiento interpersonal.
En esta etapa de mi vida decidí juntar mis grandes pasiones, que son el rubro inmobiliario, la negociación, y el entendimiento de la gente, y poder ser útil poniendo al servicio de la gente mi experiencia en esa etapa tan linda que es el cambio de vivienda.
Mariana me aconsejó en la adquisición de un terreno para edificar mi vivienda de veraneo. Estaba entre varias opciones, incluso en distintos balnearios. Finalmente, y tomando en consideración variables como que tengo mellizas pequeñas a las que entretener, nos decantamos por una hermosa parcela frente al mar en Las Garzas. Hoy estamos edificando, y felices porque sabemos que allí nuestras hijas podrán tener su verano soñado, y nosotros tendremos una libertad que de otra forma es difícil de conseguir.
Mariana me ayudó en todo el proceso de adquisición de mi casa, una hermosa chacra en la zona de Las Brujas, antes de fundar ETXEA Property Buyers. La verdad es que su mirada sobre varias otras propiedades que me habían ofrecido y que tuve en consideración, me hizo ver una cantidad de cosas que a mí se me hubieran pasado desapercibidas, y que la persona de la inmobiliaria las pasaba voluntariamente por alto porque lo que quería era que saliera el negocio. Hoy puedo decir que estoy feliz con mi elección, y más feliz porque sé que evité hacer un mal negocio.